Afirman sus vacunas contra el Covid-19 se desarrollaron utilizando la proteína fluorescente mNeonGreen de la compañía Allele de San Diego, sin el permiso de la compañía.
Mientras Regeneron toma el centro de atención por tratar al presidente Donald Trump con su cóctel experimental de anticuerpos COVID-19, la compañía ahora se encuentra junto a los desarrolladores de vacunas Pfizer y BioNTech a la defensiva en una demanda que afirma que sus productos de coronavirus infringen una patente.
Allele Biotechnology and Pharmaceuticals presentó dos demandas contra las tres farmacéuticas el lunes. La firma de San Diego alega que Pfizer y BioNTech, con su vacuna COVID-19 en investigación BNT162, y REGN-COV2 de Regeneron, se desarrollaron utilizando la proteína fluorescente mNeonGreen de Allele sin el permiso de la compañía.
Para compensar la presunta infracción, Allele busca daños y perjuicios que asciendan a no menos de una regalía razonable, dijo la compañía en su denuncia. No está claro de inmediato cuánto está buscando Allele.
En un comunicado, Regeneron dijo que no está de acuerdo con las denuncias de infracción de Allele y que “defenderá enérgicamente nuestra posición contra esta demanda”. Pfizer no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Pfizer y el candidato principal de BioNTech, una inyección de ARNm denominada BNT162b2 que está respaldada por la Operación Warp Speed de la Administración Trump, ingresaron a una prueba de eficacia de fase 3 en julio como el segundo programa de EE. UU. en hacerlo. La sociedad dijo el martes que han comenzado una presentación continua a la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), lo que permite que la agencia revise una solicitud a medida que llegan los datos clínicos.
En cuanto a Regeneron, la compañía dio a conocer hace unos días datos alentadores de los primeros 275 pacientes en un estudio de fase 1/2/3 de REGN-COV2, que combina dos tipos de anticuerpos contra el virus, lo que demuestra que podría ayudar a los pacientes no hospitalizados a limpiar el virus y mejorar los síntomas. El medicamento fue noticia la semana pasada cuando el presidente Trump recibió una alta dosis del cóctel como parte de su tratamiento contra el COVID-19.
Pero Allele afirma que el fármaco Regeneron se desarrolló con la ayuda de mNeonGreen, y señala varios artículos académicos publicados en Science y en coautoría de empleados de Regeneron que incluyen información sobre cómo se probaron los anticuerpos contra la proteína de pico del SARS-CoV-2 con la proteína fluorescente.
En la investigación médica, se inyectan proteínas fluorescentes en células vivas para que los científicos puedan visualizar los cambios moleculares y determinar la respuesta de las células a los tratamientos. Entre ellas, mNeonGreen es una de las proteínas fluorescentes monoméricas más brillantes y estables hasta la fecha y, por lo tanto, permite la detección rápida de cambios, según Allele. “Esta herramienta de investigación es aún más crítica en una pandemia global donde la necesidad de una vacuna para salvar vidas nunca ha sido más crucial”, dijo la compañía en su denuncia.
Según Allele, “buscó en múltiples ocasiones discutir sobre la concesión de una licencia por parte de Regeneron a esa patente”, pero no obtuvo respuesta.
En el caso de Pfizer y BioNTech, Allele dijo que el desarrollo y las pruebas de la vacuna candidata BNT162 de la pareja fueron posibles “solo mediante el uso de mNeonGreen”, pero los socios nunca pidieron una licencia, según la denuncia.
La tecnología les valió a las empresas “un inmediato $ 445 millones en subvenciones y más de $ 4 mil millones en ventas de la vacuna hasta la fecha”, dijo la denuncia, probablemente refiriéndose a los contratos gubernamentales que la pareja ha obtenido, incluido un acuerdo de suministro de $1,950 millones con el gobierno de los Estados Unidos.
